
⋆ 𝒅𝒆𝒅𝒊𝒄𝒂𝒕𝒊𝒐𝒏 𝘢𝘯𝘥 𝒄𝒐𝒏𝒔𝒕𝒂𝒏𝒄𝒆。◞ˎ˗
Christopher Hartley
You'd have to stop the world just to stop the feeling
Nacido y crecido en Angel Bay, Chris es el único hijo de lo que fue lo que muchos llamarían "un amor de verano", por eso no se extrañó al ser más adulto de saber que su madre no se sintió lo suficientemente preparada para hacerse cargo de él. Abandonado al nacer por ella, ha vivido solo con su padre desde siempre.Cerca de cumplir los doce años su madre contacto con él para invitarle a visitarla y que pudiesen hablar. Pensándolo ahora de mayor, no sabe si debería haberle dado esa oportunidad de entrar en su vida, pero lo hizo, el niño en él quería saber todo sobre la mujer, que ahora residía en Rusia con su nuevo marido.Fue cuanto menos extraño el encuentro, pero eso solo duró los primeros días, era un niño alegre, tranquilo y obediente, no tuvo problema con sus nuevos padres. Ambos eran dueños de una estación de esquí allí en Rusia, y aunque los deportes no eran el punto fuerte de Chris, le encantaba pasar las horas frente a la chimenea leyendo un libro. Con el paso de los años el par de meses que viajaba allí los pasaba trabajando para ayudar.Sus padres (madre y marido) fueron los que al cumplir dieciséis años le regalaron a Sheshe, una pequeña cachorra de dálmata, no sabe cómo su madre convenció a su padre, ya que este odiaba a los perros, pero él no pudo ser más feliz.Donde iba Chris, ella iba detrás, ya fuese viajando a ver las competencias de Jack como ir en avión a Rusia para navidades.
Ella también fue la que lo incentivó a hacer un curso de adiestrador canino, que compaginó con su trabajo de medio tiempo en la biblioteca, sigue sin tener claro si quiere ir a la universidad porque aunque es estudiante de matrículas, ninguna carrera le despierta la pasión que si consiguen los libros y los animales, y en eso ya trabaja.En el último viaje que hizo a Rusia, su hermana pequeña ya había nacido, tiene sentimientos encontrados, no con ella, sino con su madre y el sentimiento de rechazo que le causa ver que con él no se quedó, está lidiando con el sentimiento de desplazo y disconformidad al no saber como encajar en la nueva dinámica, lo que le hizo querer marcharse antes y volver a Oregón al poco de llegar.
Viendo los ánimos bajos de su hijo, su padre le aceptó que adoptase otro perro en casa, lo que trajo a su vida a Mimi, una cocker spaniel más joven que Sheshe y la segunda luz de sus ojos. Le agradeció bastante a su padre, ya que esté hace solo unos meses también ha empezado una relación y la soledad de la casa muchas veces se le hace un mundo.̵𝐸̵𝑛̵ ̵𝑙̵𝑎̵ ̵𝑎̵𝑐̵𝑡̵𝑢̵𝑎̵𝑙̵𝑖̵𝑑̵𝑎̵𝑑̵ ̵𝑠̵𝑢̵ ̵𝑛̵𝑜̵𝑣̵𝑖̵𝑜̵ ̵𝑠̵𝑒̵ ̵𝘩̵𝑎̵ ̵𝑚̵𝑢̵𝑑̵𝑎̵𝑑̵𝑜̵ ̵𝑎̵ ̵𝑠̵𝑢̵ ̵𝑐̵𝑖̵𝑢̵𝑑̵𝑎̵𝑑̵ ̵𝑦̵ ̵𝑒̵𝑠̵𝑡̵𝑎̵́𝑛̵ ̵𝑝̵𝑎̵𝑠̵𝑎̵𝑛̵𝑑̵𝑜̵ ̵𝑒̵𝑙̵ ̵𝑣̵𝑒̵𝑟̵𝑎̵𝑛̵𝑜̵ ̵𝑗̵𝑢̵𝑛̵𝑡̵𝑜̵𝑠̵.̵Actualmente ha pasado un tiempo desde lo anteriormente nombrado, Christopher ha pasado más de un año ingresado en el manicomio de Angel Bay tras durante varios días consecutivos buscar a una persona que no existe y que decía ser su novio.Su padre dijo a sus amigos que estaba en Rusia de manera indefinida.Hace solo unos días que ha salido del aquel lugar y ha estado en casa organizando un poco todo lo que tiene, pasando tiempo con sus perras e intentando amoldarse a que ahora la novia de su padre viva con ellos.Pasa las horas muertas en la terraza de su cafetería preferida, intentando tener el valor para hablar con sus antiguos amigos aunque de momento sin éxito, salir a la calle ya le parece un logro, más cuando intenta convencerse a si mismo de que no le está buscando en los rincones de la ciudad ¿a Jack o al duende? no lo tiene claro.